El cólera, la homeopatía y la alopatía, o sea, reglas higiénicas profilácticas y curativas que podrá ser útil consultar, antes y después que el cólera haya empezado a hacer sentir sus efectos / por C. Cruxent.

  • Cruxent, C. (Cayetano)
Date:
1850
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Credit: El cólera, la homeopatía y la alopatía, o sea, reglas higiénicas profilácticas y curativas que podrá ser útil consultar, antes y después que el cólera haya empezado a hacer sentir sus efectos / por C. Cruxent. Source: Wellcome Collection.

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    luo todo el miindo sube, la enfermedad reino con la mayor violencia. El Dr. S(*hmit ha hecho de ellos el objeto de una publicación, de la cual vamos á extraer los hechos mas interesantes.’’ “El cólera invadió la ciudad de Raab el 27 de Julio de 1831, y el numero de enfermos aumentó con tanta rapidez desde los primeros dias, que todos los módicos tuvieron que hacer un servicio muy activo. El Dr. Bakody, partidario ilustrado de la liomeopa- tia, se decidió desdel momento, a hacer de ella una aplicación exclusiva y extensa, y sus esfuerzos fue- ron coroDíados con los mas felices resultados» Oon tal motivo, el se explica en estos teríninos: “(Hasta aquí los redactores de la Biblioteca Homeopática] ahora dice el Dr. Bakody). “Yo he encontrado la homeopatía maravillosa- mente saludable contra el terrible azote del cólera, así como la había hallado anteriormente en otras enfermedades. Ella proporciona simultáneamente los medios de preservarse de la infección, de abogar la enfermedad en su germen, y de combatirla ventajo- samente aun en su mas alto grado de desarrollo, cuan- do sobrevienen los vófuitos, la diarrea, los calambres en los miembros, el frió general del cuerpo, la dismi- nución de la acción del corazón y la desaparición del pulso, Y lo mas frecuente es no ver llegar la enfer- medad á este grado, sin ) cuando se ha hechado ya mano del tratamiento alopático, ó bien cuando los so- corros de la homeopatía se reclamaban en último recurso, Con todo, aun en este caso, he logrado la i- nexplicable dicha de volver cá la vida á eiifennos cuyo estado parccia desesperado.” “Los sorprendentes resultados que obtuve, exci- Uron una sorpresa general, y la aíluencia do enfer- mos que querían curarse con la homeopatía era tan grande, que me vi en la cruel necesidad de rehusar mi» socorros á un gran número de ellos, vista la im- posibilidad en que me liallaba de bastar á todas las