El ayuntamiento constitucional de esta ciudad que vela incesantemente por la conservacion de sus habitantes ... há observado el incremento que há tenido la epidemia del sarampion, y por contribuir ... al socorro de los enfermos, há acordado se imprima el regimen curativo que de acuerdo de la Junta Superior de sanidad, manifestó al publico el Tribunal del Proto-medicato en 22 de agosto de 1822.
- Date:
- [1825]
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Credit: El ayuntamiento constitucional de esta ciudad que vela incesantemente por la conservacion de sus habitantes ... há observado el incremento que há tenido la epidemia del sarampion, y por contribuir ... al socorro de los enfermos, há acordado se imprima el regimen curativo que de acuerdo de la Junta Superior de sanidad, manifestó al publico el Tribunal del Proto-medicato en 22 de agosto de 1822. Source: Wellcome Collection.
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![EL AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE ESTA CIUDAD QUE VELA INCE- sanie mente por la conservación de sus habitantes, á los quales la providencia há puesto á su cuidado, ha observado el incremento que há tenido la epidemia de! Sarampión, y por contribuir, de ia manera que le es posible, al socorro de los enfermos, há acordado se imprima el regimen curativo que de acuerdo de ¡a Junta Superior de sanidad, manije stó al publico el Tribunal del Proto-medicato en 22 de Agosto de 1822 para auxilio de pobres necesitados que no tienen proporciones para ser asistidos por facultativos legitimóse El sarampión, por lo general, es enfermedad benigna, epidémica si, y contagiosa; pero par los desordenes de dieta, oíala curación, y ana que otra vez por la grande inflamación de la gargant», y tos sofocativa, suelen peligrar algunos; y otros en la convalecen- cia por errores de la dieta. Por tanto, el Tribunal del proto-me- dicato forma la presente instrucción para la gente pobre, procu- rándose acomodar k la capacidad de ella y su pnc3 inteligencia, haciéndoselo primero conocer para que no lo confunda con otra en- fermedad; después proponiéndole una curación segura, semilla, fá- cil y cornada k sus cortos hPoéres; y algunos avisos relativos á los síntomas jiñas urgentes, como sao, la tos, la inflamación en la garganta, y sofocación de pecho. Conócese, pues, el sarampión en estas señales. El enfermo al- gunos dias antes suele tener una tosecilla frecuente y seca; pero por lo general es mis comm preceder una indisposición general, frió y calor alternados, gran dolor de cabeza, modorra, un dolor mas & menos fuerte de garganta, y rubicundez, calor y aun esco- sor y lagrimas de ojos con hinchazón de los parpados, flujo de la- grimas muy acre y sensibilidad grande para ver la luz, estornudos frecuentes, y evacuar por las narices un humor como el que fluye de los ojos. Sigue dsspucs el calor y calentura oías & menos fraude* según es mas 6 menos fuerte la enfermedad'- de acompaña tos, .algunas veces muy fuerte b Incomoda que no los deja dormir, oPre.io0 a« pecho, conatos k vomitar, y en a'gums se observa que llegan a efecto estos conatos, dolores en los lomos, algunos cursos, y en- tonces no son tan grandes los vomites; y en otros se ven algunos sudores que son muy útiles: la lengua £„$jt& blanca y tiene pastante sed» , . Al qaarto 8 quinto día, y aun al finalizar eí tercero, se Jja.ce la erupción por la cata, que en pocas horas se .cubre o.e unas man- chas semejantes á las picadoras de poigas, pero de un í°]° roas os cuito, 8 inflamando la cutis producen upa h nchazon mapifie^ía en la cara. Cantina i la erupción por el pecho, espalda, brazos, muslos y piernas; tiene machas ve.ces ej enfermo f ujo de sangre de las narices, que alivia mucho, pues quita el dolor de cabeza, ojos y garganta. Casi todos los síntomas se mjnoran despees de la salida de las manchas; pero la tos, calentyra, y dolor de cabeza continúa. Al tercero 6 cuarto día de la aparición de las manchas sp s.ecan es- tas y caen como postillas. CURACION Esta se reduce anicarpente á diluir y refrescar e.n los casos be- nignos, cuando la calentura, la tos. el dolor de garganfa, y opre*> sion no son consideróles, en cuyo caso bastará tomar con abun- dancia agua de cebóa con miel y un poco de vinagre, y como el peso de medio real polvos de nitro, b la misma agua de ceba- da, en la cual, después da bien hervida la cebada, se echan en in- fusión las flores de sa ico, borraji d amapola, solas, sin dulce, 6 con algún jarabe como el de amapola, el violado, 6 jarabe simple que es de solo azúcar. Esta 6 la otra bebida se toman quebranta- das y en abundancia para facilitar el sudor ó mayor traspiración sin encender. Se dan baños de piernas de agua caliente, y respi- re el vaho de la misma agua caliente pira aliviar el dolor de garganta y opresión de pecho: siendo aquella, á saber, la garoanta fe é frecuentemente afligida en el sarampión debe oportunamente caverse con repetidas buchadas, y mejor geringandola con coci- miento de malva y cebada, agregándole un poco de vinagre ^miel* cuyo auxilio se practicará en la carrera de la enfermedad: poe fuera se pondrá la cataplasma dicha anodina, cuya composiciónss hará por los asistentes del enfermo: redúcese esta á miga josa de pan frío echado en leche k que hierva, se le mezcla un poco de azifran, y quitada la va-ija del fuego se le echa aceite rosado, y dicha cataplasma se repite k que no falte. Estos socorros son harto fáciles, y acaso suficientes en los ma- les regulares; tal vez no lo serán, 6 por su omisión en tiempo, 6 por que e! accidente sea mas grave y exija otros auxilios, en cu- yo caso se solicitarán, habiendo proporción para ello. Nu se toma de alimento mas que caldo y atole, bien que sí hay proporciones se pueden tomar unos j)s de naranja de cnina, y uno ó dos peronesó manzanas cocidas y añadida azúcar. La inco- modidad de la tos se socorre con algún lamedor: el mas usual y que há probado mejor es ei jarabe diacodion 6 de adormideras. Cuando las manchas rojas ponto pálidas sera bueno purgarse con un vaso de suero de á un cuartillo, el peso de dos reales jle cré- mor de tártaro y una onza ce pulpa de tamarindos o de cañafisíola Basta esta para los casos benignos; pero si Ja tos muy redoblada tenaz desvela ¿ incctr-oda, si e¡ color de garganta es muy fuer- é impide macho el tragar', y lo principal, si la O presión de pe- cho es suma no se quita solo con lo dicho, es necesario sangrar al~ enfermo una b dos veces á lo mas, si son muy urgentes dichos males, y en cantidad de tres onzas cuando mas. Este remedio, aunque tan esencial, pide alguna mas circunspec» clon, y p >r eso se ha indicado eo los casos graves, pues sin él no se superan; pero en los menores será mejor el omitirlo. Después de purgado el enfermo con el suero famarindado arriba dicho, podrá comenzar f¡ ir tomando alimentos de carne, empezan- do por gorfa-s tan ti des, pues suelea quedar muy delicados los en- íerajos y fáciles á lo que vulgo llama empacharse, de que se ori- ginan crudezis, indigestiones, y de esto diarreas, ó lo que dicen mi- sereres, cayos accidentes se evitarán con Ja moderación; y si vinie- ren, ya demandan oíros auxilios que no pueden entraren este plan, y así convendrá que se consulte un mí t ico; y por fortuna no es muy regular ni consiguiente necesario dd Sarampión. JJi que si lo es, es la tos seca y porfiada que á algunos queda, aun pasado y seco el Sarampión, la que si no cede al vapor del agua caliente inspirado, ñ los baños ribios de pies y piernas, al jarabe de diacodjoo tomado por lamedor, y aun en una que otra vez una cu- charada de él; y gi es müy füerte !a dicha tos> 9ue ro deje dormir absolutamente, una pildora de á grano de Jas conocidas en las boti- cas con el nombre pata la tos ó de las de sinoglosa; entonces se u- sará la media leche entre día, y de noche al acostarse la leche hervida, bien caliente y endulzada con azúcar, y una 6 dos de las sobredichas pildoras. , . p„ro si no obstante estos socorros continúa la tos, es preciso hacerle una sangría, sin que en esto se ofrezca duda; pues cuando to S“ ha asentado, se ha pensado lo que se ha dicho, consultado ln meior, prescindiendo de raciocinios hipotéticos y de sistémas, y se í° n re nido al solo bien del publico, sin miramientos a los críticos. Saa Luis Potosí Miyo 13 de 1825.](https://iiif.wellcomecollection.org/image/b29296584_0009.jp2/full/800%2C/0/default.jpg)